jueves, 12 de abril de 2018

6 ¿Qué pretendía el proyecto racial del partido nazi?

Cinco errores en la transcripción
Nota: 5


      OBJETIVO: Comprender, a través de los elementos que configurabas el proyecto racial nazi, su dimensión imperialista, así como el modo en que fue interiorizado por la población.


      Las teorías que postulaban la higiene racial tenían buena aceptación en Europa desde finales del siglo XIX. Intentaban dotar de contenido científico a las posiciones que defendían la desigualdad entre los seres humanos.

      El proyecto racial nazi se inspiró en esas ideas para defender la necesidad de preservar la pureza de los arios, una raza superior que necesitaba dotarse, como nación, de un espacio vital, indispensable para progresar. A partir de esos principios, los nazis desarrolaron un proyecto racial e imperial con dos ejes esenciales:

·         Exclusión dentro de la sociedad aria de los discapacitados y de los que no se identificasen con la comunidad del pueblo dirigido por Hitler (socialistas, comunistas, homosexuales…), considerados seres asociales. La raza se convertía en un concepto cultural que los excluía.

·         Identificación de determinados grupos étnicos como enemigos a los que hacía que exterminar: los judíos y los gitanos eran razas inferiores, y los eslavos, portadores de bolchevismo.

      Esta política tuvo su cénit en la persecución de los judíos. En abril de 1933 se declaró en todas las ciudades un boicot contra los comerciantes judíos.

      En 1935 se promulgaron las Leyes de Núremberg, que degradaron oficialmente a los judíos alemanes a la categoría de ciudadanos de segunda clase.

      El 9 de noviembre de 1938 tuvo lugar la llamada Noche de los cristales rotos, que presagío la Shoá, el futuro holocausto y exterminio judío en Europa.



      EL ADOCTRINAMIENTO DE LAS MASAS

Para el Estado nazi, la sociedad alemana debía tener una absoluta unidad ideológica. Se creó el Ministerio de Cultura y Propagando, que fue confiado a Goebbles, para garantizar la conformación de una cultura y un pensamiento basados en las ideas racistas y nacionalistas.

La intensa propaganda y el encuadramiento de la población en organizaciones nazis produjo una adhesión de la población atraída por el proyecto de Hitler, que exaltaba elementos como la grandeza de Alemania, el orgullo de la raza y un futuro de progreso.






      Miembros de la Juventudes Hitleriana quemando libros en Berlín. El futuro de Reich dependía de la adhesión de la juventud a las ideas nazis.



      LA LEGISLACIÓN RACIAL

1933: Boicot a los negocios judíos, a los médicos y abogados.

         Ley para la prevención de nacimientos con taras hereditarias.

1934: Esterilización y castración de gitanos.

1935: Leyes de Núremberg.

1937: Internamiento de homosexuales en campos de concentración.

1938: Semana de la “limpieza gitana” (12-18junio)

         Deportación de unos 17000 judíos polacos a la frontera oriental de Alemania.

        Obligatoriedad para los judíos de llevar en un lugar visible la estrella amarilla de David ((1           de septiembre).

        Noche de los cristales rotos (9-10 noviembre): ataques a establecimientos judíos.

1938/39: Programa secreto de liquidación de niños mal formados y después de adultos.





Cartel de propaganda antisemita que representa a un judío como un ávaro y un bolchevique (1933).



ELIMINACIÓN DE LOS DESIDENTES

Todo aquel que no aceptase el proyecto nacional y racial nacionalsocialista era considerado enemigo del pueblo, del Impero y del Führer. Así, centenares de miles de personas que por sus ideas, como los socialistas o comunistas (bolcheviques), por sus creencias religiosas, por su origen étnico, o por sus principios étnicos, se oponían al nuevo régimen político, pasaron a ser detenidas, encarceladas y, en ocasiones, asesinadas.




Presos políticos en el campo de concentración de Dachau, abierto para encerrar a la disidencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario